Uno de los aspectos que más cuidamos en nuestra residencia de mayores y ancianos en
Santiago de Compostela
es la alimentación. En nuestro comedor tenemos en
cuenta que la dieta de las personas de la tercera edad debe adaptarse a la
situación de cada uno, especialmente si hay enfermedades que limitan la
ingesta de uno u otro alimento.
Pero hay que tener en cuenta muchos más factores que la
limitación que imponen las enfermedad. La dentadura, la práctica de ejercicio,
la tensión arterial… son otros factores que influyen en los menús que servimos
en nuestra residencia de mayores y
ancianos en Santiago de Compostela.
La presencia de alimentos duros y difíciles de morder queda
descartada a partir de ciertas edades por lo que intentamos sustituirlas por
purés que resulten más fáciles de tragar para ellos.
Lo mismo pasa la ausencia de ejercicio y movimiento. Las
personas mayores consumen menos energía y absorben peor los nutrientes que una
persona más joven que lleva una vida más intensa de actividades. Esto debe
reflejarse en la alimentación para no caer en un exceso calórico innecesario.
El tema de la sal también es importante. La obstrucción de
venas y arterias y los problemas de tensión arterial son frecuentes en muchos
ancianos de ahí que reducir el consumo de sal en las comidas es una práctica
tan beneficiosa como preventiva para todos ellos.
La dieta de las personas mayores debe ser variada,
moderada y equilibrada, incluyendo alimentos de todos los grupos en las
proporciones idóneas, procurando que además coman cuatro veces al día y beban
una cantidad de líquidos que les permita estar hidratados.
En Residencia
Ocastro
cuidamos de los mayores con todo el amor y ternura del mundo,
velando por su salud y bienestar sin descuidar aspectos tan importantes como la
alimentación, siempre adaptada a la situación de cada caso.
Contacta con nosotros
Mándanos un mail
Enlaces de interés